miércoles, 4 de mayo de 2011

Lo que Hace el Amor propio mal entendido


     LO que hace el amor propio mal entendido

Al   vanidoso lo ciega
Al   egoista lo deprime
Al   abusador lo aisla
Al   orguloso lo aflige
Al   ignorante lo engaña
Al   grosero lo ridiculiza
Al   mezquino lo empobrece
Al   hipócrita lo delata
Al   malhumorado lo apena
Al   pretencioso lo inhibe
Al   cobarde lo martiriza
Al   indolente lo anula
Al   tímido lo derrota
Al   nervioso lo desmoraliza
Al   neurasténico lo atemoriza
Al   apático lo hunde
Al   tonto lo vence
Al   soberbio lo avasalla
Al   indisciplinado lo abate
Al   discutidor empedernido lo confunde
 

sábado, 23 de abril de 2011

Hay dos clases de personas en el mundo



Hay dos clases de personas en el mundo:
las que son felices y las que son desgraciadas.
Las personas felices fijan su atención en lo
conveniente de las cosas,
en las partes buenas de una conversación,
en los platos bien preparados,
en un día bien aprovechado,
en los detalles más sutiles de la vida.
Y lo disfrutan todo con alegría.
Las personas que son infelices, piensan, hablan,
y se quedan siempre con lo negativo.
Si el ser infeliz estuviera arraigado con la naturaleza de las personas,
éstas serían dignas de compasión.
Pero, como criticar y lamentarse
se adquiere por imitación o por decisión propia,
la infelicidad va creciendo hasta  convertirse en hábito.
Porque la felicidad no es un premio,
sino una consecuencia.
Y el sufrimiento no es un castigo, sino un resultado.